¿Cómo establecemos los precios en Som Energia?

Objetivo y valores de Som Energia

El objetivo de Som Energia es transformar el modelo energético hacia uno renovable, distribuido y en manos de la ciudadanía. Somos una cooperativa que no busca beneficio económico. Los precios, pues, no están fijados con el objetivo de lucrarnos, sino simplemente de garantizar la viabilidad de la cooperativa.

A la hora de fijar los precios, trasladamos el esquema que establece la normativa a las personas consumidoras. Es decir, no hacemos productos comerciales ni tarifas planas, sino que los cargos y peajes los repercutimos allá donde los establece la regulación, con el objetivo de aumentar la transparencia sobre el funcionamiento del mercado eléctrico, hacia toda la base societaria de la cooperativa.

De la misma forma, no hacemos ofertas ni descuentos para nuevos contratos, ni como estrategia para retener contratos.

Tipo de tarifas actuales

Actualmente, ofrecemos dos tarifas para cada tipo de contrato. Así, tenemos las tarifas por periodos y las tarifas indexadas. Sin embargo, la forma en que establecemos los precios es muy similar y sigue unos criterios comunes.

En el artículo siguiente del Centro de Ayuda explicamos con detalle todas las tarifas que ofrece la cooperativa.

¿Qué deben cubrir los precios?

A la hora de establecer los precios, como comercializadora, debemos tener en cuenta que los precios deben cubrir:

El coste de la energía.
Los cargos y peajes establecidos en la normativa.
Otros conceptos que deben pagarse para consumir energía.
Certificados de garantía de origen 100% renovable.
Margen para la cooperativa. No se trata de un margen para obtener beneficio económico, sino del margen que necesitamos para realizar nuestra actividad (salarios de personas trabajadoras, alquiler de oficinas, material...).
Impuestos (IVA e impuesto eléctrico).

Algunos de estos conceptos los establece la normativa vigente:

Los cargos y peajes.
Otros conceptos que deben pagarse para poder consumir energía.
Impuestos (IVA e impuesto eléctrico).

Otros dependen de la cooperativa:

Margen para la viabilidad de la cooperativa.
Certificados de garantía de origen 100% renovable.

Y otros dependen del mercado:

Coste de la energía.

Los conceptos que establece la normativa vigente los trasladamos y aplicamos allá donde establece la regulación. Estos conceptos son, por ejemplo:

Cargos. Los establece y cobra la administración, a la que Som Energia paga a través de las distribuidoras, y se destinan a lo que el gobierno decida, por ejemplo pagar la retribución específica de las renovables (antiguas primas), reducir el déficit de tarifa o financiar los extracostes insulares por la producción de energía eléctrica).
Peaje de transporte y distribución, que cobran las distribuidoras.
Costes a pagar en Red Eléctrica: sobrecostes del sistema, pagos por capacidad, penalizaciones por desvíos entre energía comprada y la que finalmente se ha utilizado…
Fondo Nacional de Eficiencia Energética.
Servicio del Operador del Mercado (OMIE) y del Sistema (REE).
Impuestos: impuesto eléctrico e IVA o IGIC.

La Asamblea General de socias y socios establece qué margen se puede aplicar. Se trata de un margen para la viabilidad de la cooperativa, es decir, para cubrir los salarios, material, alquileres de oficinas, software informático, proveedores... Actualmente, está fijado entre el 0,5 y el 2% de EBITDA (resultado antes de impuestos).

La Asamblea también ha establecido dónde debe aplicarse este margen. A día de hoy, está fijado aplicarlo principalmente sobre el precio de la energía y una pequeña parte en la potencia contratada.

Los certificados de garantía de origen 100% renovable los adquirimos a productores renovables, unas veces directamente y otras a través de intermediarios. El precio de estos certificados no está regulado, depende de la oferta y la demanda. Así pues, este concepto depende de los acuerdos a los que podemos llegar con los productores renovables y los intermediarios.

Respecto al coste de la energía que comercializamos, depende de si se trata de las tarifas indexadas o las tarifas por periodos:

El coste de la energía en las tarifas indexadas es el coste de la energía en el mercado mayorista diario. Cada día a cada hora, la energía en el mercado mayorista diario tiene un precio diferente (por eso las tarifas indexadas varían todos los días cada hora).
Saber el coste de la energía en las tarifas de periodos es algo más complejo. Lo explicamos en el siguiente apartado.

¿Cómo sabemos cuánto nos cuesta la energía para las tarifas de periodos?

Evidentemente, el coste de la energía está relacionado con su origen y con el modo de obtenerla.

Cuando hacemos una revisión o actualización de los precios de las tarifas por periodos, la parte de la energía la trabajamos de la siguiente manera:

Primero hacemos una previsión de cuánta energía necesitaremos en los meses siguientes (mientras estén vigentes, los nuevos precios). Esta previsión la hacemos en función del número de contratos que tenemos, el tipo de consumo que suelen tener y la época del año (si serán meses fríos o calurosos, con mucha demanda de energía, o si serán meses de entretiempo con poca demanda…). Una vez tenemos la previsión de la demanda, iremos a buscar la energía. La obtenemos de diferentes maneras:

Una parte la compramos en mercados de futuros, con meses de antelación. Llegamos a acuerdos con entidades financieras que trabajan con mercados de futuro o con productores de energía. En estos acuerdos nos comprometemos a comprar una cantidad determinada de energía durante los meses siguientes, y acordamos a qué precio vamos a pagarla. A esto se le llama “comprar la energía en el mercado de futuros” (aunque también incluye a productores). Esto nos sirve, a Som Energia, para tener la seguridad de que podremos obtener esa cantidad de energía a un precio que ya conocemos, fijado y cerrado, y que no variará por mucho que al cabo de unos meses el coste de la energía haya subido o bajado. Tener acordado el precio al que vamos a comprar la energía nos permite poder establecer el precio para las semanas o meses siguientes (y, por lo tanto, no tener que cambiar precios constantemente).

Otra parte de la energía proviene de nuestras plantas de producción. Al ser nuestras plantas, ya sabemos cuál es el coste de esta energía (el coste de construcción, puesta en marcha y mantenimiento de las plantas). No depende de las fluctuaciones y especulaciones del mercado energético.

Para poder ajustar más la cantidad de energía que compramos, otra parte la compraremos poco antes de comercializar en el mercado diario de la energía, por lo tanto, en el momento de fijar los nuevos precios, todavía no sabremos cuánto nos costará. En este caso, pues, debemos hacer una previsión, en función de diferentes parámetros, de cuál será el precio al que compraremos la energía. Habitualmente, esto no variaba mucho. Sin embargo, desde el verano de 2021, el coste de la energía que compramos para comercializar ha ido aumentando de forma exponencial, llegando a niveles imprevisibles. Las previsiones que habíamos hecho quedaron desfasadas y por eso tuvimos que actualizar las tarifas antes de lo previsto.

Con estos tres parámetros, obtendremos una previsión de lo que nos costará comprar la energía para comercializarla.

Para establecer el precio de la potencia para cada uno de los dos periodos horarios:

Aplicamos los peajes y cargos establecidos por la normativa.
Aplicamos la otra parte del margen para la viabilidad de la cooperativa.

En la factura

En las facturas de electricidad, aparte de los precios de la energía y la potencia, se añaden posteriormente los impuestos y otros conceptos (alquiler de contador, costes por modificaciones de contratos…), establecidos por normativa o por las distribuidoras. Si tu contrato es doméstico, con menos de 15 kW de potencia contratada, puedes consultar estos artículos: Entender la factura 2.0TD periodos y Entender la factura 2.0TD indexada.

Revisión de precios

Continuamente revisamos las previsiones hechas y la realidad del momento a fin de llevar a cabo un seguimiento de la evolución del mercado de la electricidad y de todos los elementos que hemos detallado. El objetivo no es otro que asegurar la viabilidad económica de la cooperativa, al tiempo que mantenemos tarifas competitivas y robustas ante la variabilidad del sector.

Habitualmente, y según está establecido por la Asamblea General, actualizamos los precios dos veces al año, en enero y julio. Algunas veces los cálculos indican que deben subirse precios; y otras, que no es necesario variarlos, y otras, que deben bajarse.

Desde el verano de 2021, sin embargo, el Consejo Rector (órgano designado por la Asamblea) tuvo que aprobar su modificación con mayor frecuencia. Fue necesario por la complicada situación del mercado eléctrico y la volatilidad del coste de la energía: si no se hubiesen subido las tarifas, el coste de comprar la energía habría sido muy superior al precio al que la comercializamos.

Aparte de las modificaciones de precio establecidas por Som Energia, de las que siempre avisamos con 30 días de antelación, también puede ser que los precios se tengan que modificar si se aprueba una nueva regulación que modifica alguno de los importes que se deben pagar por consumir energía (por ejemplo, el IVA, los cargos o los peajes). En estos casos, los cambios deben aplicarse al momento y no es posible avisar con antelación.