Las tarifas indexadas

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En este artículo hablaremos de:

¿Qué es una tarifa indexada?

De forma general, una tarifa indexada de electricidad ofrece energía a precio de mercado, con un margen para la comercializadora que la ofrece.

A diferencia de una tarifa fija, que tiene un precio pactado con anterioridad según un determinado horario, en una tarifa indexada el precio de la energía es variable cada hora, en función del coste de adquisición de la energía en el mercado mayorista de la electricidad. Hay, pues, 24 precios al día, y cambian de un día a otro.

En el caso del Estado español, el mercado de referencia para calcular el precio de la luz en las tarifas indexadas es el mercado diario. Este mercado lo gestiona la empresa privada-regulada OMIE, que es la operadora de mercado designada, excepto en Baleares y Canarias donde el precio es definido por Red Eléctrica de España (REE).

En el enlace anterior puedes ver el precio de la energía mayorista que se aplicará todos los días para cada una de las 24 horas siguientes. Entre las 12 h y las 13 h de la mañana se actualizan los valores.

A partir de los datos del mercado diario, desde Som Energia tenemos a disposición de las personas y entidades con tarifa indexada una página de tendencia de precios hora a hora con la tendencia de precios sin impuestos, pero que incorpora, tal como se explica en la misma página, la gran mayoría de componentes de la fórmula que explicaremos más abajo.

El gráfico que se muestra es útil, ya que informa de las horas en que es más económico utilizar la energía.

Características de la tarifa indexada

A consecuencia de lo comentado en el punto anterior, si dispones de una tarifa indexada, no puedes prever con fiabilidad el coste final que tendrá la factura. Y, por tanto, será más incierto que si dispones de una tarifa fija (en el caso de Som Energia, las tarifas por periodos).

Ahora bien, las tarifas indexadas ofrecen más posibilidad de ahorro, si tu uso eléctrico es más flexible, es decir, si tienes mayor capacidad de mover tus usos energéticos a las horas más económicas.

También hay variación por días, por lo tanto, también es interesante mirar, aparte de las horas, si cada día es por lo general más económico o más caro, e intentar consumir la energía principalmente en los días en que la energía es, por lo general, más económica.

En las tarifas por periodos, una vez exploradas las vías de reducir energía, optimizar las potencias contratadas y el autoconsumo, las posibilidades de ahorro se reducen a mover los usos energéticos entre periodos horarios (P1, P2, P3…), según marque la tarifa que tengas contratada.

Otra característica de las tarifas indexadas es que reflejan las variaciones del mercado (tanto a la baja como al alza) de forma inmediata. Es decir, si el precio de la energía sube, el precio de esta tarifa, sube; y si el precio de la energía baja, el precio de esta tarifa también desciende.

En una tarifa fija, estas variaciones de precio se reflejan de forma más lenta: cuando se realiza un cambio de tarifas. En Som Energia el cambio de tarifas puede ser cada seis meses, aunque en algunas ocasiones se han realizado dos o tres en medio año. Cuando hay una de estas actualizaciones, informamos con 30 días de antelación.

En el este enlace puedes encontrar más información sobre el funcionamiento del sistema eléctrico y el papel de Som Energia.

¿Cómo se calcula el importe a pagar?

El importe a pagar por la energía utilizada es la energía utilizada cada hora multiplicada por el precio horario correspondiente a esa hora.

La energía utilizada cada hora se obtiene a partir del contador o equipo de medida. La distribuidora facilita a la comercializadora un archivo con el registro del consumo horario, son las llamadas curvas de carga horarias (CCH).

El precio horario se calcula a partir de la fórmula indexada donde se introducen las variables del mercado y el resto de costes asociados a la adquisición de la energía. Es decir, el precio de cada hora contiene el precio que marca el mercado mayorista más el resto de costes asociados a la compra de energía.

El coste de la energía de una factura mensual de 31 días es la suma de la energía empleada cada hora multiplicada por el precio horario en cada una de las 744 horas del periodo facturado (31 días x 24 horas/día = 744 horas/mes).

Al coste de la energía habrá que añadir el resto de costes habituales de la factura: potencia, excesos de potencia y energía reactiva (en su caso), bono social, impuesto eléctrico, alquiler del contador, IVA, etc.

¿Cómo se calcula el precio horario? La fórmula indexada

El precio horario de la energía final que resulta en la factura se obtiene aplicando una fórmula que incorpora todos los costes que pagamos como comercializadora por la adquisición de la energía. Es una fórmula que calcula el precio de coste de la electricidad comercializada, a la que añadimos una franja de comercialización que sirve para cubrir el resto de gastos propios de la actividad comercializadora.

Aunque cada comercializadora que ofrece tarifa indexada acaba aplicando una fórmula propia, esta suele ser bastante similar, ya que incluye los distintos elementos que conforman el precio final de la energía.

Igualmente, si estás comparando dos o más ofertas con tarifa indexada, no es suficiente con comparar la franja de comercialización: también habrá que echar un vistazo a cómo se configuran las fórmulas, para comprobar que sean equivalentes.

En el caso de Som Energia, la fórmula que utilizamos traslada de forma directa estos costes al precio final, y es la siguiente:

PH = 1,015 * [(PHM + Pc + Sc + Dsv + GdO + POsOm) (1 + Perd) + FE + F] + PTD + CA 

Donde: 

  • PH = precio horario de la energía. 
  • PHM = precio horario del mercado diario. Para los contratos de la Península es el precio OMIE, para los sistemas insulares, es el precio horario de la demanda correspondiente al sistema balear y al sistema canario.
  • Pc = pagos por capacidad.
  • Sc = sobrecostes por la gestión de la red.
  • Dsv = desvíos.
  • GdO = garantía de origen 100% renovable.
  • POsOm = coste del operador del sistema y del operador del mercado.
  • Perd = pérdidas reguladas del sistema desde el punto de generación al punto de consumo.
  • FE = aportación al Fondo de Eficiencia Energética. 
  • F =franja de la cooperativa (el margen para la viabilidad de la cooperativa)
  • PTD = coste regulado de los peajes de transporte y distribución. 
  • CA = coste regulado de los cargos del sistema. 

La gran mayoría de variables son públicas y están disponibles para ser consultadas en la web del organismo correspondiente. En este documento, que puedes descargarte, explicamos con más detalle cada una de las variables de la fórmula indexada.

Los desvíos (Dsv) es el coste de la penalización entre la energía programada y la energía finalmente utilizada. Parte del coste es publicado por Red Eléctrica, al que se aplica —tal y como se explica en el documento anteriormente enlazado— un factor propio de la cooperativa.

Las garantías de origen 100% renovable (GdO) son el coste de adquisición de estos certificados. Tanto las garantías como los desvíos son costes variables que actualizamos trimestralmente, tal y como puede verse en el apartado de precios de la web.

La franja de la cooperativa (F) la definimos desde Som Energia e incluye el margen para la viabilidad de la cooperativa. Cuando actualizamos este valor, lo comunicamos a todos los contratos con tarifa indexada con treinta (30) días de antelación. También la tenemos publicada en el apartado de precios de la web.

Las tarifas indexadas en Som Energia

Desde la cooperativa ofrecemos la tarifa indexada a todo tipo de puntos de suministro.

En nuestro Centro de Ayuda puedes ver un resumen detallado de las tarifas que ofrecemos desde la cooperativa. También las puedes ver en el apartado de precios de la web.

¿Cómo facturamos la tarifa indexada en la práctica?

La facturación con tarifa indexada que llevamos a cabo desde Som Energia se realiza a partir de los mejores datos disponibles en el momento de facturar.

Por un lado, necesitamos las curvas horarias de consumo. Sin embargo, puede que para algunos contratos no dispongamos de estos datos o que estén incompletos. En estos casos, las mismas distribuidoras facilitan los llamados “datos calculados según coeficientes perfilados”. Esto significa que el consumo a facturar [1], obtenido a partir de las lecturas inicial y final en cada periodo tarifario, se reparte horariamente siguiendo la proporción que el operador del sistema (REE) ha calculado que tendría el tipo de usuario de cada tarifa.

En la práctica, y únicamente para estos casos comentados, implica que no facturamos realmente la energía utilizada a cada hora, sino la energía que corresponda según el reparto del tipo de caso.

Por otro lado, también necesitamos conocer el resto de costes variables. Cada organismo publica sus datos y en algunos casos los van actualizando en periodos posteriores. Así pues, también utilizamos los mejores datos disponibles en el momento de facturar.


[1] En los contratos con autoconsumo puede haber una discrepancia entre lecturas y consumo debido a la aplicación del balance horario.

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